Bueno, el tiempo vuela.
Y es que han pasado ya varios días desde el último post, y uff, entre unas cosas y otras, …, pasa el tiempo, y pasan cosas, afortunadamente.
Espero os hayáis percatado del nuevo look de la página y de la incorporación de la nueva imagen del gato con botas, que encabeza el blog y que espero me acompañe mucho tiempo en mis andanzas.
Hace dos viernes almorcé con Cristina y Migue, de la grúa estudio, creadores de «mi» gato.
Si ya es bueno de por sí compartir mesa con bocata, olivas y café por medio, lo es mucho mejor si viene acompañado de ideas, proyectos y emprendedurismo.
Hablamos de rsc, de discapacidad, de educación social, de derechos de autor, de espacios coworking, de la exposición itinerante Una posibilidad entre mil, del porqué del título La máquina de Efrén …
Gracias Cris y Migue por vuestra valentía, coraje y autenticidad.
Siempre sale algo de estos coalmuerzos. Al tiempo. Cuanto menos, uno sale reforzado en su idea de colaborar, cooperar, compartir, y la posibilidad de cocrear.
Así reza la filosofía del próximo encuentro de responsabilidad social empresarial que se realizará en Villareal los días 3, 4 y 5 de abril. Allí estaré. Gracias Cristina por hablarme de Carmen Martí.
Ya lo dice uno de los eslóganes de LinkedIn: deja de buscar trabajo, empieza a conocer gente.
Las redes sociales tienen mucha culpa de ello. Las redes han llegado para quedarse, y son una fuente inagotable de oportunidades.
Y si la imagen del gato ha sido el primer gran estreno, el segundo gran estreno, que anuncié en el anterior post, fue el pasado domingo en el teatro Escalante, de Valencia. Qué pasada!! Veinticinco jóvenes en riesgo de exclusión y personas con discapacidad intelectual, presentaron un espectáculo circense de la mano de la Finestra Nou Circ y cuatro entidades sociales: Iniciatives Solidaries, asociación Alanna, Alter Valencia, y asociación La Cambra.

Precioso: el circo como herramienta para el fortalecimiento de habilidades personales y sociales y como medio para la adquisición de habilidades artísticas fomentando así la motivación, integración, autoestima, ….
En un par de meses de trabajo, Quico, Andrés, Víctor, Emily, Leslie y veinte jóvenes más, han sido capaces de ilusionar y maravillar a un repleto patio de butacas.
Qué gozada ver las caras de los papás y educador@s de l@s chic@s.
Felicidades chic@s, felicidades César y Juanín, por el trabajo realizado. Esta tarde toca evaluación, y a seguir trabajando con la vista puesta en Nápoles. Sí, está previsto que en el mes de julio un grupo de estos jóvenes artistas realicen un intercambio transnacional con la Compagnia Elefanti.
Ahí es nada.